
Dónde estás? Para qué te escondés? No te molesto, si no me querés... Sólo quiero que me hablés.
No siento nada de más, sólo muero cada vez que vas, y yo quiero escapar. Escucho tú voz, no escucho que me decís.
Cuándo salga este sol, vas a ver que soy yo quién espere mojada y sola. Cuándo digas que no vas a ver que soy yo, la que diga que sí! Estoy perdiendo, nene. Estoy pudriendome! No voy a hablar de fé, no!
No.
No hay comentarios:
Publicar un comentario